domingo, 10 de julio de 2016

*TAPADOS RECUERDOS.

Debajo de todas las hojas
que cubren las calles
de nuestro barrio . . .
están guardadas
las historias compartidas.
Solo el viento podrá con ellas,
para luego seguir juntos
el camino, sin adversidad.
Hoy . . . solo son deseos,
sueños, poesías,
e inolvidables momentos,
de bellos recuerdos compartidos.

*SIN RUMBO.

Te encontré
habitando entre penumbras,
quebrada el alma.
Te abrí el corazón
y, con besos,
te devolví el aliento . . .
Con suaves caricias
comenzaste a vivir,
a reír y a caminar
el nuevo sendero
de la vida olvidada,
hasta que . . .
firme y fuerte
segura y confiada,
tras la ansiedad
partiste sin rumbo
ni despedida.

*VIDA VACÍA.

Se quebró la luz en tu cintura
y, en el brillo de tus bellos ojos,

brotó la madrugada,
mientras las estrellas
corrían por tus pechos
a ritmo cabalgamos
la noche más inesperada,
hasta que el sol
descubrió la mañana,
para parir sin alma
el día menos soñado,
entre lágrimas,
reproches y caricias,
partiendo en soledad
mi corazón en llamas,
gritando el silencio de tu nombre,
en el vacío de mujer
con la vida destrozada.





*SOLEDAD EN LOS BARES._

La tristeza invade el viejo bar;
la mesa del rincón susurra la soledad y,
a media luz,entre vidrios empañados
de espesa humedad, solitaria bebes
el tercer café de la noche, sin levantar la cabeza,
clavando la vista al centro de la mesa.
Te observo mientras espero las musas
que quizás se perdieron en esta noche de invierno,
tal como vos perdiste quién sabe cuánto tiempo,
pensando dónde y con quién estará el amor
que invadió tu alma en una noche más
de un Buenos Aires que comienza a dormir,
acompañando, sin saber, a nuestro insomnio rutinario
de cada noche, en la soledad de los bares,
donde nos buscamos sin encontrarnos.


sábado, 9 de julio de 2016

*NOCHE.

Sumergidos en la noche
Buenos Aires nos habla;
en cada esquina,
cuenta una historia
y, a cada paso,
vibran sus veredas
de viejas y tristes nostalgias
que humedecen labios
en tristones bares
arrinconando amores,
sueños, alegrías y tristezas,
de una noche más,
sobre las bellas calles porteñas
de soledades encontradas
en una diagonal, una esquina
y un tango.  

*AGUA CALIENTE.

Empapados, preparé café,
mientras vos, buscabas los pocillos.
Llovía como nunca
en lo que iba del invierno.
Te tomé por la espalda
y dejé a un lado la vieja cafetera.
Preferí tu piel a las toallas,
y empapados caímos en la cama,
nuestras bocas encendieron
el resto de nuestros cuerpos
y una travesura de ambos
nos hizo conscientes
de morder el espanto
de las nuevas consecuencias.
Llueve, calentemos el café,
la noche recién comienza.

viernes, 8 de julio de 2016

*NOS VIMOS.

No jugabas chinos
ni deshojabas margaritas,
odiabas el tabaco
y detestabas el alcohol.
Tu oído estaba tapado
y tu vista
jamás se detuvo
ante una obra de arte,
singularmente única,
pero . . .
justo pasé, te vi,
me viste, nos vimos
y estallaron
los cristales de la noche,
hasta que el sol,
partió nuestro corazones
uniéndonos en la melodía
más perfecta
entre cristales rotos.

jueves, 7 de julio de 2016

*SENTIDOS.

Conozco esos gestos
que te describen perfecta
y solo pertenecen a vos,
excitando el silencio
en las sombras del cuarto,
y me llevan a recorrerte
en todos tus sentidos,
para que,
humedecidos ambos,
repliquemos hasta el alba  . . .
una y otra vez
todos los sentidos.




*JUNTOS.

Entre rincones
asoman recuerdos,
vuelven viejas melodías
y paisajes recortados
de lindos recorridos
por rutas inolvidables,
perfumes, pinares, llanuras
sierras y valles
que solo contigo,
en las mañanas de mate,
las tardes de sol
y las noches de frío,
juntos compartimos.

*DULCE SERENATA.

Se me hizo poesía,
que parí en Buenos Aires,
y descubrí la magia
de caminar con vos,
recorriendo Corrientes
Diagonal y el Bajo.
La noche, los cafés
y soñar con bailar
el tango de Piazzolla
cantado por el polaco,
y frente al Obelisco
brindar por los dos,
cuando la noche culmine
y el sol nos guiñe
en cuatro,
cantaremos el día . . .
que la vida parió,
la dulce serenata,
que entonaré para vos.

*ANTES DEL AMANECER.

Pestañas de cristal,
labios de sirena,
pupilas de diamante,
alma de arcángel.
Solo tú,
el resto es un cuento
en el mundo de las fábulas
de la calle sin brisa,
la noche sin luna
y el día sin sol,
Solo tú,
te encuentras
en el viejo laberinto
de las sensaciones
que busqué la noche
que parió el tango
sobre Buenos Aires
antes del último amanecer
de aquella primavera
que nació en el Obelisco
y vistió Corrientes
como nunca antes,
al dos por cuatro
al escuchar tu voz.

Entre Vos y Yo. +

El brillo de tus ojos, el color de tu cabello y la sensualidad que despliegas en cada palabra de enojo, solo está en vos, en las canas que e...