martes, 6 de mayo de 2025

Fue en un recodo del Delta,
donde el arroyo Felipe
se curva como un suspiro
que no quiere despedirse.
Allí, la encontró una tarde,
recostada entre las cañas,
con el pelo suelto al viento
y la piel recién mojada.
Venía de otro silencio,
de otra orilla, de otra calma.
Él buscaba solamente
un refugio, una cabaña.
Pero en sus ojos turbios
como el barro de las ramas,
vio la promesa de un fuego
que ni el río le apagaba.
Ella hablaba cómo sueñan
los que han dormido en la arena,
con palabras demoradas,
y una risa que se queda.
Le mostró su casa humilde,
hecha de mimbre y paciencia,
con ventanas sin relojes
y paredes que no esperan.
Allí el amor fue creciendo
como crecen los camalotes,
sin apuro ni destino,
pero con raíces nobles.
Se amaron en las madrugadas,
bajo cielos sin tormenta,
y también cuando llovía
y el tejado no alcanzaba.
Y los puentes…
Ah, los puentes. . . 
Testigos de cada cita.
Puentes de madera rústica
que crujen con las visitas,
puentes que unían los cuerpos
cuando el río los partía.
El Felipe era un espejo
de los besos detenidos,
y esos puentes, entre sauces,
fueron templos escondidos.
Él cruzaba cada día
con el corazón herido
y al pisar sobre sus tablas
le volvía el albedrío.
Hubo mates compartidos
en la punta de un muelle,
lecturas en voz muy baja
y caricias con orquestas
de chicharras y jilgueros
y ese perfume salvaje
que tiene el junco en la siesta.
Pero el Delta tiene ciclos,
y a veces se va quien llega.
Una mañana sin letras
ella partió río abajo,
sin promesa ni retorno,
como se van las estrellas
cuando el alba las desarma.
Él quedó con la casita
que ahora llama su condena.
La arregla, la pinta, la espera,
le habla a los muebles viejos
como si fueran de ella.
Y cruza el puente despacio
aunque ya no haya otra orilla,
como quien aún cree en milagros
aunque duelan las costillas.
Y cuando el Felipe canta
por las noches más serenas,
él cree ver entre la niebla
su figura entre los juncos .
Porque el amor en el Delta
no muere, solo navega.
Y los puentes, si recuerdan,
a veces nos traen de vuelta.

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