DESGASTE. *

A la deriva del sol
Escondiendo lagrimas,
guardando la angustia
de las solitarias noches,
camina y vuelve al encierro,
sin despejar la ausencia,
sin controlar los impulsos,
las lagrimas caen sobre sus mejillas,
doloridas y arrugadas
que marcan el caudal del dolor,
en la deriva de un incierto
porvenir oculto entre paredes
que intenta reconstruir
sin resultado, perdiendo
los mejores años de su vida
a las sombras de un amor
que no fue, y nunca lo sera,
marchitando la bella
flor que se esconde
en el corazón mas grande,
que tiernamente se desgasta
a minutos desojando días sin futuro.

DESCALZA VIVA. +

Descalza cruzó los bosques
despojando heridas y tabúes,
respirando aire fresco
que tanto necesitaba.
Descubrió la naturaleza
en su piel adormecida
y susurro la libertad
que tanto deseaba.
Camino, cruzo fronteras
rompiendo esquemas del pasado
y al llegar a la cima en cordillera
grito como nunca había pensado,
siguió camino y tomo vuelo
su corazón palpitaba en la mañana
y al descender en los brazos
de su amado dejo caer en lágrimas
su nombre ya olvidado,

para comenzar una nueva vida

detrás del macizo que tanto la encerraba.

HOY. *

Achinados ojos de la mañana,
tristeza que se funde en la almohada
en insólitas pesadillas  que van y vienen,
cuarentena, aislamiento, y sueños
que surgen del inconsciente y se transforman,
decisiones que se toman a la mañana,
se modifican al medio día
y se desmienten por la noche,
retos, gritos y contradicciones
para ir o venir a su antojo, ella manda,
ella obliga, ella decide y en el laberinto
nos perdemos la vida sin rumbo.
Un nacimiento, una alegría, sonrisas
y un futuro que comienza el crecimiento,
una lágrima, una perdida, muchas perdidas
y un llanto sin futuro, nos vamos
nos quedamos, el ritmo de las contradicciones
el tango de la burla diaria y una única salida
partir, pero a donde, si acá ya no hay
más nada por hacer, nos vemos, nos vamos?
o esperamos sentados el entierro.

SOLEDADES DE DOMINGO. *

Detrás del vidrio
mis lágrimas gritan,
mi corazón palpita velozmente
y acortando la distancia,
te tiendo la mano una y otra vez,
en la loca aventura de saber
que todo lo que soñé es posible,
hoy desvelo las noches solitarias
acunando un sueño dentro de la pesadilla
más larga y difícil de tu vida,
la tarde pasa y en demora
vuelo una y otra vez
a recordarte en el silencio
donde las palabras se cruzan
en un largo e interminable crucigrama,
igual al enredo mental,
donde día a día convives,
en busca de un futuro, que
lejos de todos, te espera 
valiente mariposa de  la tarde
de las solitarias tardes de domingo.

MAÑANA DE DOMINGO. *

Entre nubes de domingo
tu nombre llega dibujado
en el cielo, el sol refleja
la aventura se sortear
blancas y espesas mañanas
de un invierno en retirada,
tu calidez se asoma despertando
el día, rompiendo la noche
y desbaratando sueños rotos
en la soledad de una ciudad vacía,
en el susurro de un viejo tema musical,
me acompañas, acariciando notas
de saxo en los rincones de la casa,
donde suena tu voz pausada y suave
despertando un día mas
en el dibujo del abrazo
que nunca nos separa, entre flores
que aun, duermen la espera primaveral
para brillar como el color a vida
que diario pinta mis días, como el
fuego azul de tus ojos a mi lado
hoy y siempre, enredado en tu cabellos
en mis días cada mañana como el sol
de tu bella e intensa mirada, que dibujo
entre letras solo para vos.

SOLEDAD. *

La tarde del olvido,
la noche del espanto,
tus ojos llenos de lágrimas
y un laberinto sin salida,
detrás de la puerta del encierro.

Abrazos a la distancia,
palabras que llegan en susurro,
y un corazón encarcelado
sin libertad, sonrisas guardadas
y copas de vino sin compartir,
el amor en tiempo de cuarentena
y un poema inconcluso encerrado,
en el sobre del tiempo
esperando la libertad en la angustia
distante de muchos te amo.
Una paloma, una promesa,
y vos, abrazada a la almohada
de la soledad día y noche.

CARICIAS DE SOL. *

En tus labios,
se fue la tarde de septiembre,
mis dedos jugaron tus cabellos
al enredo del sol en  retirada.
Nos abrazamos ya casi de madrugada,
y al despertar de aquella novela
que juntos vivimos crujiendo
fantasmas de un lejano pasado
envolvente en la memoria.
Nos prometimos el amor
para toda la vida, lagrimeaste,
sonreí, me miraste.
Y hoy, pasado los años,
el recuerdo sonríe en tus labios,
y mis dedos enredados en tu
lacio y largo cabello, sonríen
al compás de mis labios
sobre los tuyos en caricias de sol.

SOLA. *

Tu voz susurra en la noche,
las estrellas vinculan tus sueños,
y acurrucada en el rincón de la cama,
intentas viajar a los brazos
que te esperan llenando el vacío
que se produce cada vez que
te acuestas resignada a la soledad.
Los minutos corren,
los días pasan lentamente,
Buenos Aires duerme
y en un rincón, una mesa
del viejo bar de San Telmo,
te espera una flor, una poesía
y un beso, que cambiara tu vida,
lo sabes, lo intuyes, lo deseas,
y el último compás de un tango,
llega el beso de las buenas noches,
en la poesía a tus labios en madrugada.

EL PRIMER CAFÉ. *

El día se escapa en rincones
grises de angustia y nostalgia,
Buenos Aires se queja detrás
de miles de ventanas, cerrando
la amargura de un tango sin melodía,
Corrientes lagrimea añorando
el paso a paso de los porteños
que ya se fueron de viaje,
la noche duerme entre sobresaltos
de trasnochados bohemios,
al compás del último verso
de poetas sin memoria, y a lo lejos
tu nombre suena, en la distancia
de cada madrugada, donde esperas
que el mundo despierte de la pesadilla,
sentada en la  cama con encaje y la taza
del primer café del día, para seguir sobreviviendo
en el vacío de las sabanas frías, esperando
el abrazo que llegara  de lejos
cuando el mundo despierte
y el sol te guiñé un ojo robándote
la primera sonrisa del día.   

SIN DISTANCIA. *

No hay tiempo ni distancia,
fronteras ni gobiernos,
no hay color ni raza que lo detenga,
puede que vuele en el éter
de las ondas más lentas,
en un mensaje esperanzador,
o circulé desde el más moderno
de los satélites en órbita,
pero de cualquier manera,
nada ni nadie impedirá
que llegue el mensaje
de amor, que rompa
el mal estar de tu día,
en la distancia más larga
y sinuosa que cruce el universo.

LLUEVE. *

Llueve, detrás de las ventanas,
llueve, me abrazas y a media luz
la música de la  tarde suena.
En la suave respiración que
emerge de tu cuerpo entre
susurros, de solitario cansancio,
te enojas, tus ojos se achinan
y callas, desaparece el brillo
y se esconde la siempre
inmaculada sonrisa de tu rostro,
Llueve se escapa la tarde,
en el silencio del abrazo
y solitariamente duermes,
acurrucada en el frío
de una tarde mas, donde
las palabras se confunden,
entre gotas de lluvia,
ráfagas de viento y la incertidumbre
que provoca el silencio
del profundo y sano amor
que se desliza por el vidrio
y acaricia  mi rostro.