lunes, 17 de julio de 2017

*ELLAS

Corren, se escapan,
van y vienen, me buscan,
me encuentran, me persiguen,
me nombran y se ocultan.
Vuelven, me despiertan
y fluyen sobre las hojas,
saltan al teclado, ríen,
lloran y se duermen;
trasnochan y despiertan
con el alba, gritan,
protestan, se van y regresan
a la hora menos pensada del día,
al lugar más insólito,
y ahí se vuelven a presentar.
No sé su nombre,
tampoco su edad,
el sexo lo imagino.
Mujer, tal vez me equivoque,
va y viene, o van y vienen,
ella o ellas
quién o quiénes,
la o las, él no creo,
ellas casi seguro
y nueve, que nunca me abandonan.

*TE AMARÉ

Te amaré en cada segundo
de frágil aliento,
en cada momento
de lento roce, en cada espacio

y silencio...
hambriento de tu aroma.
En el naufragio de las horas
carentes de estrellas,
en lo eterno
como significado
de tu presencia.
En ese mar que suena
a todo lo que callas,
en el misterio y milagro
del amor que nunca muere
que no se toca pero se siente,
y se siente tan fuerte
antes, después y siempre.
Te amaré en cada palabra
de mis locas poesías,
y el susurro de las letras
que, día a día, te nombran
cruzando mares
y venciendo macizos
para encontrarte
entre mis escritos.

*SUEÑOS Y AROMAS.

Brillante, elegante,
entre pétalos perdidos
de la luna que esa noche
acarició tu cuerpo,
mientras juntos
acunamos el encuentro
a orillas del río,
brillaron tus ojos
de placer y cansancio
entre estrellas de placer
hamacando la luna
de sueños encontrados,
en abrazos soñados
hasta que el sol
nos encontró deslizando
el día de la mano.
Partiste elegante del sueño
y, entre viejos aromas,
vuelves una y otra vez
a mi memoria.

domingo, 16 de julio de 2017

*DESPLAZAMIENTO.

Te desplazas entre la brisa tibia
de los labios carmín
y mis brazos entrelazados
a tu cintura desequilibrante
del tiempo en re menor,
tu cabello llovizna
sobre mi pecho y tú
subes y bajas en la noche,
perdiendo la noción del tiempo,
el espacio y el lugar que nos cobija,
mientras la ciudad
circula al ritmo alocado
de no mirarse nunca más
entre sonrisas ni poemas de amor
enlazados al viento.

*ACOMPASADOS.

Voy a guardar el sol en una caja,
atrapar la luna por algunas horas,
a solas, junto a vos;
compartiremos una noche
única y azul,
acaramelada de sueños
y dulces caricias de chocolate,
donde solo nuestros cuerpos
hablarán en el silencio.
A la luz de la luna llena,
sonreirás, brillando en cada suspiro,
y el eco del respiro
parpadeará la noche;
entre besos y abrazos,
nuestros cuerpos cabalgarán
en el vuelo ancestral
del respirar soñado
hasta el último aliento,
donde llegaremos
juntos y acompasados.

viernes, 14 de julio de 2017

*CARLITOS.

Los broches irán perdiendo
la vida útil que un día,
le dieron a la madrina
y a las horas de tu infancia.
Los años que, en adelante,
ahora te tocan vivir
son muy lindos, amiguito,
que los pases muy feliz.
Ya tienes casi seis años
y la puerta abierta está,
de la escuela que a mí,
un día, me comenzó a formar.
En ella te enseñarán
cómo se suma y se resta,
tendrás muchos amiguitos
y empezarás a soñar;
vivirás mil alegrías;
conocerás a un señor que,
con todas sus palabras,
te enseñará la lección
quizás aprendas también
un poco a sufrir y
otro poco a llorar;
irá creciendo tu vida,
un hombrecito serás;
el tiempo quemará años
y un futuro anhelarás;
vivirás la secundaria
y, al final de ese camino,
ya todo un hombre serás.
Ojalá recuerdes los broches
que la madrina tenía
cuando digas, algún día,
"mi problema no existía",
quizás yo te diga ahora,
que ni un problema tenía:
Qué  linda era la infancia
pero... qué linda es la vida.


Del libro "Tiempo para vos y mis amigos"

*MI BARRIO.

Entre avenidas y verde,
arroyo y demolición,
un túnel que sigue el curso
de una larga discusión;
un convento, siete iglesias,
el bodegón y trece escuelas;
el recuerdo de dos cines,
fantasmas de la estación.
Yo voy y vengo en sus calles
después que se pone el sol,
pues me acompañan la luna,
la droga y mucho alcohol.
Y así es como es,
ese pedazo entrañable
de mi querida ciudad,
que va cayendo, de a poco,
rumbo a la Gral. Paz.
Saavedra: el patio, la esquina,
la barra, el rioba
y una avenida que, caprichosa,
viborea entre sus calles
y que derrama humedad.
También el amor que va,
que viene y que pasa,
sin detenerse... en ninguna esquina.

martes, 11 de julio de 2017

*SÁBADO DE PARTO.

Dejó el último verso
sobre la mesa,
debajo del grueso pocillo
de negro café.
Con el pucho en la oreja
se fue por Corrientes
debajo del funyi
guardaba una flor,
de papel de servilleta doblada
y en do, fue silbando un tango,
cruzando veredas,
buscando la mina
que lo derrotó,
en un dos por cuatro
sin quebrada,
sobre el abanico del cielo
que, en Buenos Aires,
el sábado parió.


lunes, 10 de julio de 2017

*MAYO OLVIDADO.

Entre lloviznas,
la noche tu nombre acaricio
sobre la vieja manta
de suave algodón;
a oscuras y en el silencio
de los agitados suspiros,
el encuentro se fundió
hasta las lágrimas,
en recuerdos, viejas
y añoradas anécdotas
de años sin vernos.
La pasión pudo más que el tiempo,
los abrazos, más que la distancia
y, entre besos y caricias,
nos descubrió el sol,
cuando la despedida
era eminente y en años
quemamos la vida
entre sábanas enroscadas
sin pudor, aquel día de mayo
del año que ya olvidé.

domingo, 9 de julio de 2017

*INDEFINIDAMENTE.

Entre gotas de finos cristales,
tu rostro se desdibuja
en el tiempo de los jazmines en flor.
La tarde acuna, una y otra vez,
la suave melodía en saxo tenor;
y en la soledad del domingo,
una y otra vez,
las letras caen en hiladas poesías
intentando describirte.
Bella y única,
entre vidrios empañados
y el frío de la incansable tormenta
que parte mi corazón
cada vez que pienso en vos.
Tus acaramelados ojos
y ese brillo que solo tu rostro
fija en mis palabras...
sostenidas indefinidamente.

*TARDE.

Detrás de los cristales
la lluvia castiga el barrio.
Entre truenos y relámpagos
el domingo acuesta la tarde.
En la siesta del sol escondido,
la noche se adelanta
oscureciendo el cielo oculto
y, otra vez, vuelve a roncar,
haciendo vibrar la tarde.
Y en la soledad tu nombre
resuena en ecos perdidos
bajo la  lluvia que moja las hojas
con letras que se diluyen
buscando cómo llamarte.
Por las calles, suena una melodía
y llega tu recuerdo,
entonces el adiós se va
con el paso del tren,
con el silbato sórdido y repetido
del último tango
sobre la estación de mi barrio.

Entre Vos y Yo. +

El brillo de tus ojos, el color de tu cabello y la sensualidad que despliegas en cada palabra de enojo, solo está en vos, en las canas que e...