La ciudad de los truenos
y los relámpagos
surgió en medio
de la oscura noche;
la carretera se iluminó
y jugamos con sus dibujos,
al costado de la ruta.
Te abracé,
en horas partías;
en horas el sol,
después del chaparrón,
se llevó tu cuerpo,
pero dejó en mí
todo lo que jamás
podría haber escrito,
ni imaginado.
Ese día partió un cuerpo,
pero... dejó la enseñanza
y ... la esperanza
de que todo es posible.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Entre Vos y Yo. +
El brillo de tus ojos, el color de tu cabello y la sensualidad que despliegas en cada palabra de enojo, solo está en vos, en las canas que e...
-
A vos, mujer sutil y temerosa, te dedico estas palabras con respeto y amor, como una suave brisa que acaricia tu alma, y como un cálido abr...
-
En la distancia que nos separa, hay un hilo invisible que nos une, en cada llamada, en cada mensaje, se siente la presencia, aunque no est...
¡Que bonita frase!
ResponderEliminarLa esperanza
de que todo es posible.
Un abrazo Osvaldo.
Muchas gracias Conchi,un abrazo
ResponderEliminar