tus ojos vidriados de lágrimas
que contienes
con toda tu fuerza;
solo el sol
despejará el día
para iluminar el sendero
que te llevará a la felicidad,
solo la lluvia
mojará tu rostro y tu cabello

de diversos avatares de la vida,
luego, en medio del sendero,
al final del laberinto,
en el último pasillo de salida,
encontrarás mi mano tendida
y, juntos,volaremos
al arco iris de sueño
que más de una vez
creímos inalcanzable
antes de conocernos.