la virtualidad,
los mensajes se archivan
y la voz comienza a deleitar
los tonos sostenidos,
precarios, tristes o alegres.
Justo ahí,
cuando nos sentamos
a conversar,

cafés endulzados
entre azúcar y stevia,
descubro
tu real personalidad,
tu historia de desvelos,
sueños y anhelos.
Justo ahí,
cuando el móvil
se guarda o se apaga,
y, por un largo rato,
nos miramos a los ojos,
en la conversación
más hermosa del día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
"Gracias por comentar mis letras....espero tu próxima visita....."