donde el bosque perfuma,
debajo de los acantilados,
cuando rompen furiosas
las traviesas olas del mar,

recorrimos rincones
de viejas y nuevas historias,
allí. . . estás vos,
azabache cabello, sutil mirada,
profunda belleza,
labios carmín, pausada,
firme, fuerte y débil,
tenaz y trabajadora eternamente
mujer, única en el cono
de las nostalgias secretas,
las alegrías perfectas
y lágrimas justas,
solo tú . . .
el resto, es un simple
bolero antiguo.
Un bolero antiguo que se hace nuevo cada vez que se le dice "te quiero" a la persona amada.
ResponderEliminarMuy bonito Osvaldo.
Acabo de ver que me añadiste a tu círculo de Google +, y es por ello que llegué hasta tu blog. Me gusta lo que he leído, visto y oído, así que me quedo en él, con tu permiso.
Un saludo
MARÍA JOSÉ SÁNCHEZ VÁZQUEZ,muchas gracias y nos mantendremos en contacto,un abrazo
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
EliminarSe me olvidó dejarte la dirección de mi blog, por si te apetecía echarle un vistazo, sin compromiso, claro: http://elvahoenlosespejos.blogspot.com.es/
ResponderEliminarSaludos