La brisa del sol
en tus pupilas,
el viento de las nubes
en tus pestañas
y el sonido rutilante
de las estrellas
en el suave y luminoso
de las estrellas
en el suave y luminoso
parpadear de tus bellos ojos
hablan por ti
en la cansada tarde
del domingo que... se escapa
con la llegada de la luna
con la llegada de la luna
bañando tu cuerpo
escondida en la tarde
que escapó,
mientras nos abrazábamos,
olvidándonos del mundo.
Muy bello poema
ResponderEliminarSaludos
muchas gracias,un abrazo,seguimos comunicados.
ResponderEliminar