Desde que te encontré
mis días dejaron de ser
la triste rutina de la soledad,
y comenzaron a recibir
el tenue color de
la aguada acuarela
de mis dibujos,
casi sin pensarlo
fue pasando el temor,
la honestidad se hizo
presente en las palabras
y hasta en las acciones
del ida y vuelta,
olvidé la duda
comencé a confiar
mientras seguían pasando
los días y los meses
que se hicieron rato,
y saber de ti cada día
lo más hermoso
jamás pensado
antes de tu llegada.
Por delante
queda un largo camino,
tal vez sinuoso o recto,
quizás oscuro o brillante,
fácil o complicado,
pero de tu mano
y tú de la mía
todo será posible
porque el pacto que sellamos
en la intimidad de largas noches
es y será eternamente sagrado
hoy, por muy pocos respetado,
la verdad, la sinceridad y
el respeto mutuo que nos tenemos.
por todo eso e infinitos días mas
brindo por ti, por mi, por ambos
y esto atado a un barrilete
llevando tu nombre y el mio
con la emoción y la sensibilidad
que nos une a estar siempre juntos
a pesar de la distancia, el tiempo
y cualquier adversidad.